Saturday, June 23, 2007

Qué grandes sois - Tengo una clase cojonuda

Terminar los exámenes es toda una liberación. Pero hacía tiempo que no estaba sin hacer NADA durante más de tres horas seguidas, o al menos sin pensar que no tengo nada que hacer por obligación. Ayer fue un día muy largo, un día que empezó a las seis de la mañana, con estrés, con un examen a medio estudiar que finalmente salió no demasiado mal. Una comida con alguien a quien quiero, una tarde de piscina con otra persona a la que también quiero y, finalmente, una cena y salida nocturna con gente a la que si no quiero, aprecio muchísimo. Y decir que aprecio es poco dependiendo de los casos. Con lo cual una jornada completita y rica en amor. ¿Qué más se puede pedir en un día en el que todo parecía tan triste a las seis de la mañana? ¡Un día grande! Como toda esa gente que tanto se hace querer.
La gente que me conoce bien sabe que con poco a mí se me puede poner cara de tonta. Con unas cuantas fotos llenas de buenos recuerdos me basta. Pero no. Hicieron más y, además de eso, me regalaron un peluche enorme, un boli, un paquete de "prohibido abrir hasta Maastricht" -todo un puntazo- y sobretodo sonrisas. ¡Y no me merezco tanto! Esos momentos, además de hacerte sentir importante, te demuestran lo que alguna gente es capaz de hacer por tí. Buena gente, que no siempre abunda. Y hacen que no te quieras desprender de ella... Una clase increíble. Unos cuantos futuros periodistas que ojalá fueran paradigma de la profesión. ¡No me he ido y ya tengo ganas de volver!

1 comment:

Anonymous said...

Lo prometido es deuda y aquí estoy, se que tarde, pero aquí estoy.
La gente va y viene, todos vamos haciendo nuestra vida, siguiendo por nuestro camino. Si hay algo que he aprendido en los últimos años es que lo bueno de la vida es que encuentras a gente que no esperabas, que no sabes cuanto tiempo andará a tu lado, que no sabes por qué pero está contigo. Y eso no importa porque lo bueno, es que has podido estar con ellos.
Tú eres una de esas personas. Hay que aprender a valorar los minutos, los segundos que estas con la gente, esos que te hacen sentir bien y no querer que nada cambie. Nosotras no hemos estado 'demasiado' tiempo juntas y sin embargo siento que te tengo que agradecer muchas cosas. Tu amabilidad, tus sonrisas, el no poner una mala cara nunca (a pesar de que seamos unos pesados), tu ayuda en cualquier problema.
No se el resto, pero yo estas cosas las valoro mucho porque no son habituales. No hay mucha gente dispuesta a preocuparse por los demás... y tu lo haces. Así que muchas gracias por tu entrega y sabes que aquí estoy para cualquier cosa (y no es una frase hecha!). Sobre todo ahora que las dos somos Erasmus.
Estás invitada a Trier (Alemania) cuando quieras, ya sabes.
Ánimo estos primeros días de adaptación y nos vemos prontito!!!!
DISFRUTA Y GRACIAS!
ROCÍO!!!
(www.atraves-delaventana.blogspot.com, espero que te metas y escribas algo!! muak!)